Eso, un ventilador.Porque son la expresión máxima de lo perfecto, y no lo digo por su diseño, lo digo porque me recuerdo haber comprado uno que ahora está lleno de polvo en su rejilla. Sigue funcionando como el primer día, ni siquiera hace un ruido más molesto que el que hacía cuando lo compré.
En la casa de algunos familiares está todavía el ventilador cansado, es que ya no alcanza a dar la vuelta porque algún diente tiene vencido. Ese que intenta diluir su potencia en toda la sala pero que se queda apuntando siempre al mismo lado.......pero funciona dando tantas vueltas por minuto como el primer día.
Creo que son la máxima expresión de la ingeniería, porque ni un buen auto dura lo que dura un ventilador.
En la casa de algunos familiares está todavía el ventilador cansado, es que ya no alcanza a dar la vuelta porque algún diente tiene vencido. Ese que intenta diluir su potencia en toda la sala pero que se queda apuntando siempre al mismo lado.......pero funciona dando tantas vueltas por minuto como el primer día.
Creo que son la máxima expresión de la ingeniería, porque ni un buen auto dura lo que dura un ventilador.
1 comentario:
Todavía me resuena en la cabeza tu reveladora frase, cuando descubriste como se le dice a esos ventiladores por estos lados: "Solo un argentino los puede llamar TURBOS".
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